
En este bloque, la sociedad Watchtower expone una verdad que se encuentra a lo largo de todo el Nuevo Testamento, pero luego, con textos fuera de contextos termina negando esa verdad.
LA WATCHTOWER COMIENZA CON UNA PREGUNTA:
¿Se necesita más que solamente fe para obtener salvación?
Efe. 2:8: 9, VV (1977): »Por gracia [»bondad inmerecida», NM] habéis sido salvados por medio de la fe; y esto no proviene de vosotros, pues es don de Dios; no a base de obras, para que nadie se gloríe.» (La entera provisión de Dios para la salvación es una expresión de la bondad inmerecida de Dios. De ninguna manera puede un descendiente de Adán obtener salvación por su propia cuenta, por más nobles que sean sus obras. La salvación es un don que proviene de Dios, y que se da a los que ejercen fe en el valor del sacrificio de su Hijo para expiar los pecados). («Razonamiento a partir de Las Escrituras Página 343 ).
Esa fue sólo una pequeña ración del buen trigo…
PERO VEAMOS LO QUE VIENE DESPUÉS…
Sant. 2:14, 26, VV (1977): »De qué sirve que alguien diga que tiene fe, si no tiene obras? ¿Acaso podrá esa fe salvarle? Porque así como el cuerpo sin espíritu está muerto, así también la fe sin obras está muerta». »Razonamiento a partir de Las Escrituras» Página 343 -.
¿Qué Explicación Aporta La Watchtower Sobre Este Texto?
¡Ninguna!, sólo expone el texto, dando lugar a que el lector extraiga su interpretación. ¡Y qué difícil es interpretar este texto sin conocer su contexto, y sin saber a quiénes fue dirigida la exhortación (se debería leer 2: 5 al 13). El que ignora su contexto terminará creyendo que la salvación se obtiene mediante fe + obras. Ese texto requiere especial atención: Nótese que Santiago 2:14 no habla de alguien que tiene fe, sino de alguien que dice tener fe, el texto dice: »De qué sirve que alguno diga que tiene fe…?»
Léase el contexto del texto (vs. 5 al 13) y obsérvese que quienes decían tener Fe era sólo de boca. En el verso 15 y 16 Santiago les dice que la fe genuina no solo se muestra por el decir, sino por el hacer. La última parte del texto dice: ¿Acaso podrá esa fe salvarle? ¡Claro que no!, esa fe no salva. Porque la clase de fe que ellos alardeaban tener era una fe estéril, sin fruto.
Característica De La Fe Salvadora
La fe genuina, la que salva, produce obras. Un cristiano no es salvo por <fe más obras>, sino por la <fe que obra>. Las obras son prueba externa de una fe genuina, ahora Santiago define la cuestión, y dice:
»En verdad, como el cuerpo sin espíritu está muerto, así también la fe sin obras está muerta» (Sgo. 2:26 -Versión Nuevo Mundo-).
Santiago compara la fe con el cuerpo y asemeja las obras al espíritu, él dice: La fe sola es como un cuerpo sin espíritu. Nuestro espíritu no puede estar sin el cuerpo; si el cuerpo queda solo es porque está muerto, sin vida. De igual manera, la fe sola es una fe muerta, sin vida.
EN SANTIAGO RADICA UN <APARENTE > CONFLICTO
Vale la pena sacarlo a la luz: Él dice que Abraham fue justificado por obras:
»¿No fue declarado justo por obras nuestro padre Abrahán después que hubo ofrecido a Isaac su hijo sobre el altar? (Sgo. 2:21 -Versión Nuevo Mundo-).
¡Pero Pablo Dice Lo Contrario!: ¡Pablo dice que no somos salvos por obras!:
» (…) si a Abrahán se le declarara justo como resultado de obras, tendría base para jactarse; mas no con Dios (…) ¿qué dice la escritura?Abrahán ejerció fe en Jehová, y le fue contado por justicia. Ahora bien, al que trabaja no se le cuenta el pago como bondad inmerecida, sino como deuda. Por otra parte, al que no trabaja, pero pone fe en el que declara justo al impío, su fe le es contada por justicia»(Ro. 4:1-5 -Versión Nuevo Mundo-).
¿Había desavenencia entre ambos apóstoles, o se contradice la Biblia? ¡Ninguna de las dos! ¿Cómo se entiende entonces?
LA OBRA DE ABRAHAM FUE EL FRUTO DE UNA FE GENUINA
El <fruto> se vio en Génesis 22:1 al 14: “… y extendió Abraham su mano y tomó el cuchillo para degollar a su hijo” (verso 10).
INTERESANTE DETALLE En Génesis 22 Abraham puso en evidencia el fruto de su Fe, pero antes de hacerlo ya estaba justificado por la FE. O sea, él no fue justificado por la obra que realizó, la obra fue el resultado (el fruto) de la FE que tiempo atrás había depositado en Dios; obsérvese que la Biblia -Versión Nuevo Mundo- que usan »los testigos» también lo dice:
»Y él puso fe en Jehová; y él procedió a contárselo por justicia» (Gé. 15:6 -Versión Nuevo Mundo-).
Abraham fue justificado en Génesis 15, y en Génesis 22 se vio el fruto.
LA FE ES LA RAÍZ Y LAS OBRAS EL FRUTO
Al árbol no lo hace el fruto, ¡la raíz hace al árbol! Pero el árbol se conoce por sus frutos. Y aunque el fruto no hace al árbol, el fruto muestra que el árbol tiene vida.
FIN DEL < APARENTE > CONFLICTO
Como vemos, no hubo contradicción entre Pablo y Santiago, ambos hablaron de la Justificación. Pablo de la justificación por la FE (la raíz), y Santiago del fruto de la Fe que justifica. Concluimos entonces que:
< El ORIGEN > de la salvación es < LA GRACIA >: »Por esta bondad inmerecida, en verdad, ustedes han sido salvados» (Ef. 2:8 -Versión Nuevo Mundo-).
< EL MEDIO > para obtener la salvación es < LA FE >: » han sido salvados < POR > la fe» (Ef. 2: 9 -Versión Nuevo Mundo-).
< LA EVIDENCIA > de la salvación son < LAS OBRAS >: »(…) fuimos creados en unión con Cristo Jesús <PARA> obras buenas» (Ef. 2: 10 -Versión Nuevo Mundo-).
¿CUESTA ENTENDER?: Dios no salva <POR> obras sino <PARA> buenas obras.
No < fe + obras > sino < FE que obra >.
ALGUNOS EJEMPLOS DE < LA FE QUE OBRA >
Por la fe, Dios primero salva al pecador, y luego el Espíritu Santo comienza Su obra de regeneración: Dios salvó y luego transformó a Saulo, un homicida (Hechos 8:1), quien después llegó a ser el gran apóstol Pablo. El mismo Dios salvó y después transformó a Moisés, otro homicida (Éxodo 2:12), de cuya manos luego recibimos la Ley. Dios salvó y después transformó a Rahab la ramera, por medio de la cual después salvó la vida de muchos (Josué 2: 1-24). Dios salvó y después transformó a María Magdalena, una endemoniada (Marcos 16:9), quien después sirvió al Señor hasta el fin de sus días. Dios salvó y después transformó a Mateo, un estafador y repudiado cobrador de impuestos (Mateo 9:9-13). Dios salvó a uno de los dos ladrones que habían sido crucificados juntamente con Jesús (Lucas 23:43), al ladrón que creyó y percató que estaba perdido.
Uno de los homicidas dijo: »(…) Cristo Jesús vino al mundo para salvar a pecadores. De estos yo soy el más notable» (1 Tim. 1:15 -Versión Nuevo Mundo-).
Frase Célebre: »No te importará escuchar la mentira cuando sepas toda la verdad»: